Hace tiempo solía vivir la «enfermedad» con auténtico rechazo. Pensaba que si enfermaba, era porque no era lo suficientemente fuerte y saludable; lo que me hacía sentir bastante mal conmigo misma. Afortunadamente, nunca he padecido ninguna enfermedad grave.
Años más tarde, comencé a escuchar y abrirme a la idea de que la enfermedad no era algo horrible que te ocurría; si no que tenía una causa emocional. Te informaba de algo. Entonces era casi peor; porque al menor síntoma corporal (dolor, infección, malestar, etc.) me lanzaba a «leer» el significado según diferentes autores. Y no solo me sentía mal por no ser fuerte y saludable, si no además por tener un conflicto o desequilibrio emocional.
Hace unas semanas, cogí la famosa gripe que anda molestando a más de uno; y a diferencia de otras etapas de mi vida, no rechacé lo que me estaba pasando; lo que me permitió abrazar la gripe y todo lo que me podía brindar.
Comparto 2 claves importantes para que puedas escuchar tu cuerpo:
CLAVE 1: no pienses nada negativo sobre lo que te está ocurriendo, y por supuesto, no pienses nada negativo sobre ti. Simplemente siente.
CLAVE 2: hazte las siguientes preguntas. ¿Qué te impide la enfermedad? ¿A qué te obliga?
Y si tienes algo que aprender, seguro que estás preguntas te pueden dar una pista. Y por supuesto, sigue también las recomendaciones de un médico profesional.
A mi me ha ayudado, ¿Quieres saber a que?
Así que ahora estoy mucho más relajada.
Espero que te sea útil. 😉